Pizza Ibérica

Para la Pizza Ibérica prepara la masa fina crujiente:
Disuelve la levadura y el azúcar en el agua tibia y deja reposar 10 minutos.
En un bol, mezcla la harina con la sal. Haz un hueco en el centro y añade el agua con levadura y el aceite de oliva.
Amasa hasta obtener una masa lisa y homogénea. Forma una bola, cúbrela con un paño húmedo y deja reposar durante 1 hora o hasta que duplique su tamaño.

Prepara la salsa de tomate:
En una sartén, calienta el aceite de oliva y sofríe el ajo, la cebolla y el pimiento verde picado durante 5 minutos.
Añade las piparras trituradas, el tomate y el orégano. Cocina a fuego lento durante 15 minutos, removiendo ocasionalmente. Tritura y cuela el resultado, ajusta la sal y deja enfriar,

Montar la pizza:
Precalienta el horno a 250 °C con calor arriba y abajo (coloca una piedra para pizza si tienes).
Extiende la masa sobre una superficie enharinada hasta lograr un disco fino de unos 30 cm de diámetro.
Coloca la masa sobre papel de horno o directamente sobre la piedra caliente.
Unta la base con la salsa de tomate preparada.
Espolvorea la mezcla de quesos de manera uniforme.
Coloca las rodajas de salchichón ibérico, reparte las aceitunas negras por toda la pizza y coloca encima un par de piparras.

Hornear:
Introduce la pizza en el horno precalentado y hornea durante 8-10 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente y el queso bien derretido.