Tiramisú de Chocolate Blanco con Fresas

Para el Tiramisú de Chocolate Blanco con Fresas prepara la crema de chocolate blanco:
Derrite el chocolate blanco al baño maría o en el microondas (en intervalos de 20 segundos para evitar que se queme). Deja enfriar un poco.
Mezcla el queso mascarpone con el chocolate blanco derretido hasta obtener una crema suave.
Monta la nata líquida con el azúcar glas y el extracto de vainilla hasta obtener picos firmes. Integra esta nata montada con movimientos envolventes a la mezcla de mascarpone y chocolate blanco. Reserva en la nevera.

Monta el tiramisú:
Moja ligeramente los bizcochos de soletilla en café frío (o sirope de fresa mezclado con el Amaretto, si prefieres una versión sin café o leche al gusto).
Coloca una capa de bizcochos en la base de un molde o recipientes individuales.
Añade una capa de crema de chocolate blanco sobre los bizcochos.
Extiende una fina capa de mermelada de fresa sobre la crema.
Cubre con láminas de fresas frescas y espolvorea con una capa uniforme de fresas liofilizadas trituradas.

Repite las capas:
Continúa alternando capas de bizcochos, crema, mermelada, fresas frescas y fresas liofilizadas hasta llenar el molde. Finaliza con una capa de crema.
Espolvorea cacao en polvo sobre la superficie.

Refrigera:
Deja reposar en la nevera al menos 6 horas (idealmente toda la noche) para que los sabores se integren y los bizcochos absorban la humedad de la crema.

Decora antes de servir:
Antes de servir, decora con una fresa fresca en cada ración, unas hojas de menta y, si deseas, un poco más de fresas liofilizadas trituradas para aportar textura crujiente.