Tartaleta de Vainilla con Crema cítrica, Frambuesas y Nata de Chocolate Blanco

En un cazo hervir la nata, retirar del fuego y agregar el chocolate blanco en trozos, mezclar hasta incorporar, templar y enfriar muy bien en nevera.

En un vaso de batidora ponemos la harina, la sal y la mantequilla. Triturar e incorporar el huevo batido y el agua, procesar en batidora o robot de cocina.

Una vez quede una textura arenosa con los ingredientes incorporados, retirar la masa y trabajarla brevemente aplastando hasta que quede una masa compacta y con todos los ingredientes bien incorporados. Filmar la masa con papel film de cocina, reservar tapada en el frigorífico al menos una hora.

Pasado el tiempo retirar la masa del frigorífico y partirla en trozos para templar su temperatura. Poner un poco de harina en la mesa y estirar con el rodillo hasta obtener una masa de 3-4 mm. de ancho, trabajar rápido. Cortar la masa con un cortapastas del tamaño igual que el molde de tartaleta donde luego hornearemos.

Coger moldes de tartaleta, poner las bases cortadas e ir pegando a los laterales y base de nuestros moldes. Pinchar con el tenedor por toda la masa en la tartaleta y cortar con un cuchillo los sobrantes en caso de haberlos, rellenar con garbanzos para que la masa quede lisa y no se abombe. Repetir el proceso con la masa en las tartaletas. Se puede conservar la masa no usada envuelta en film en la nevera.

Precalentar el horno a 180ºC. Cuando lo tengamos y transcurrido el tiempo de las tartaletas en nevera, hornearlas sobre diez minutos, retirar los garbanzos y terminar de cocer en el horno otros cinco/siete minutos, esto depende del tipo de horno.

Mientras en un bol mezclar la leche condensada, la ralladura y zumo de limas y mandarinas. Batir e incorporar las cuatro yemas. Una vez estén bien mezclados los ingredientes, rellenar con esta crema las tartaletas y volver a hornear sobre siete minutos.

Montar la nata con chocolate bien fría y meterla en una manga con boquilla rizada, reservar en nevera.

Transcurrido el tiempo, retirar del horno y dejar enfriar. Una vez frías colocar las frambuesas y la nata reservada bien montada (podemos usar chantilly), finalizar con una hoja de menta.

Listo para comer.

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