Canelones Rellenos Gourmet Gratinados con Bechamel Trufada

Preparar el Relleno de Carne (Ragú):
Calienta 2 cucharadas de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio.
Añade la cebolla, la zanahoria y el apio (soffritto) y sofríe a fuego lento durante 8-10 minutos, hasta que estén tiernos y translúcidos.
Sube el fuego y añade las carnes picadas. Cocina, desmenuzando con una cuchara de madera, hasta que estén doradas y sin líquido.
Vierte el vino blanco y deja que se evapore el alcohol por completo (unos 3-4 minutos).
Incorpora el tomate triturado y el caldo de carne. Salpimienta al gusto y añade una pizca de nuez moscada.
Reduce el fuego a bajo, tapa y cocina a fuego lento durante al menos 45-60 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que el ragú esté espeso y lleno de sabor. Si queda muy líquido, cocina destapado los últimos minutos.
Retira del fuego y deja enfriar un poco antes de rellenar. Añade el Parmigiano rallado y mezcla bien.

Cocer las Láminas de Canelones (si usas secas):
Mientras el ragú se cocina, si usas láminas secas, cuécelas en abundante agua hirviendo con sal siguiendo las instrucciones del paquete (normalmente 8-10 minutos), hasta que estén al dente.
Escúrrelas con cuidado y extiéndelas sobre un paño limpio o papel de horno ligeramente aceitado para que no se peguen.

Preparar la Bechamel Trufada:
En una cacerola, derrite la mantequilla a fuego medio. Añade la harina y cocina, removiendo constantemente, durante 2 minutos para hacer un roux rubio (no dejes que se dore demasiado). Retira la cacerola del fuego y añade la leche caliente gradualmente, batiendo vigorosamente con unas varillas para evitar grumos.
Vuelve a poner la cacerola a fuego medio-bajo y cocina, sin dejar de remover, hasta que la salsa espese y hierva suavemente durante 1-2 minutos.
Retira del fuego. Salpimienta, añade una pizca de nuez moscada y, lo más importante, incorpora la crema de trufa (o el aceite de trufa al gusto), mezclando bien. Prueba y ajusta la sazón.

Preparar el Aceite de Albahaca (Aceite Verde):
En un procesador de alimentos o batidora de vaso, combina las hojas de albahaca, el aceite de oliva y la pizca de sal.
Tritura a máxima potencia hasta obtener un aceite verde brillante y homogéneo. Pásalo por un colador fino o una gasa para obtener un aceite más limpio y vibrante, desechando los sólidos. Reserva.

Rellenar y Enrollar los Canelones:
Precalienta el horno a 190°C (375°F).
Extiende una cucharada generosa de relleno de carne en cada lámina de pasta.
Enrolla cada lámina de pasta con cuidado para formar un canelón.

Montar y Gratinar:
Cubre el fondo de una bandeja de horno (idealmente de cerámica o vidrio) con una fina capa de bechamel.
Coloca los canelones rellenos en la bandeja, sin que se superpongan.
Cubre los canelones generosamente con el resto de la bechamel trufada.
Espolvorea uniformemente con el queso Mozzarella y el Parmigiano Reggiano rallado.
Hornea durante 20-25 minutos, o hasta que la bechamel esté burbujeante y el queso dorado y gratinado a la perfección. Si el queso se dora demasiado rápido, puedes cubrir con papel de aluminio.
Para un dorado extra, los últimos 5 minutos puedes usar la función grill (¡vigila de cerca para que no se queme!).

Emplatado:
Deja reposar los canelones unos minutos fuera del horno antes de servir para que el queso se asiente.
Con una espátula ancha, coloca cuidadosamente 1 o 2 canelones en cada plato plano gourmet.
Con una cuchara, crea líneas o puntos artísticos con el aceite de albahaca alrededor del canelón, como se ve en la imagen.
Decora generosamente con los microgreens frescos en la parte superior del canelón. Si usas, añade unas flores comestibles para un toque final de elegancia.
Sirve inmediatamente y disfruta de esta obra culinaria.