Cheesecake de Café
Ingredientes:
Modo de preparación:
Para la Cheesecake de Café empieza por triturar las galletas:
Titura hasta textura de arena fina y mezcla con la mantequilla fundida y la sal (puedes agregar un poco de azúcar moreno, cereales o frutos secos picados).
Extiende la mezcla en un molde desmontable de 20 cm., presionando bien con el dorso de una cuchara o el fondo de un vaso.
Refrigera 15 min. para compactar.
Para el relleno:
Hidrata la gelatina en agua muy fría durante 10 min.
Disuelve el café en la leche caliente y añade la gelatina escurrida. Mezcla hasta disolver completamente.
Bate el queso crema con el azúcar glas, la vainilla, la sal y el licor hasta textura suave y sin grumos.
Incorpora la mezcla de leche, café y gelatina templada.
Monta la nata a picos medios y añade con movimientos envolventes.
Vierte la mezcla sobre la base de galleta.
Alisa y refrigera mínimo 5–6 horas, idealmente toda la noche.
Para el glaseado de Café y Chocolate blanco:
Calienta la nata con el café hasta casi hervir.
Vierte sobre el chocolate troceado y mezcla desde el centro hacia afuera hasta obtener una emulsión brillante.
Añade la mantequilla y remueve hasta integrar.
Deja templar a 30–32 °C (debe estar fluido pero no caliente).
Vierte sobre la cheesecake ya fría, extendiendo con espátula hasta cubrir uniformemente.
Refrigera 30 min más para que el glaseado se asiente.
Presentación:
Desmolda con cuidado, pasa un cuchillo caliente por los bordes si es necesario.
Decora al gusto. Virutas de chocolate, canela, cacao, granos de café bañados o un cordón de crema chantilly al café.
Servir fría, entre 6 °C y 8 °C.
Notas Finales:
Usa chocolate blanco de cobertura profesional (mín. 30% manteca de cacao) para un glaseado estable y brillante.
La nata y el queso crema deben estar fríos para montar bien, pero la mezcla de café debe añadirse templada, no caliente.
Si buscas una versión más intensa, sustituye parte del café por espresso ristretto y añade unas gotas de extracto de cacao.