Tarta Mousse de Chocolate

Para la Tarta Mousse de Chocolate prepara la mousse de chocolate:
Hidrata la gelatina, coloca las láminas de gelatina (5 g) en agua fría durante unos 5 minutos para que se hidraten.
Mezcla queso crema y azúcar:
En un bol, bate el queso crema con los 40 g de azúcar hasta obtener una textura suave y homogénea.

Añade nata y leche:
Agrega los 200 g de nata para montar a la mezcla de queso crema y azúcar. Añade unas gotas de jugo de limón (moderado para no alterar el sabor).
En paralelo, calienta los 40 g de leche en un cazo a fuego bajo hasta que esté caliente (sin hervir).

Incorpora la gelatina:
Añade las láminas de gelatina hidratada a la leche caliente y remueve bien hasta que se disuelvan completamente.

Funde el chocolate:
Funde el chocolate oscuro (100 g) en un baño maría o en el microondas en intervalos de 30 segundos, removiendo cada vez para evitar que se queme.

Monta la nata para el chocolate:
Monta ligeramente los 120 g de nata para montar y luego incorpórala al chocolate fundido con movimientos suaves para que no pierda aire.

Mezcla todo:
Vierte la leche con gelatina en la mezcla de queso crema, nata y azúcar. Mezcla suavemente.
Añade el chocolate con nata montada a esta mezcla final, con movimientos envolventes para obtener una mousse homogénea y esponjosa.

Llena el molde:
Vierte la mousse en el molde SN2128. Alisa la parte superior con una espátula para obtener una superficie plana.
Lleva el molde al congelador durante al menos 4-6 horas (preferiblemente toda la noche) para que la mousse cuaje completamente.

Prepara la capa de espejo de chocolate:
Hidrata las láminas de gelatina (4.5 g) en agua fría durante 5 minutos.

Preparar el espejo de chocolate:
En una cacerola pequeña, mezcla los 135 g de leche, los 60 g de azúcar y los 30 g de cacao en polvo. Calienta a fuego bajo, removiendo constantemente hasta que el azúcar y el cacao se disuelvan por completo.

Añadir la gelatina:
Retira la cacerola del fuego y agrega las láminas de gelatina hidratadas. Remueve bien hasta que la gelatina se disuelva.

Enfriar el espejo:
Deja que la mezcla baje a temperatura ambiente. Es importante que no esté caliente al verterla sobre la mousse, ya que podría derretirla.

Montaje final:
Saca la mousse de chocolate congelada del molde y colócala sobre una rejilla.
Vierte la capa de espejo de chocolate sobre la mousse con movimientos uniformes, asegurándote de cubrir toda la superficie. Deja que el exceso de espejo caiga por los lados.

Refrigerar:
Lleva la tarta al frigorífico durante 2-3 horas para que la capa de espejo se fije y la mousse termine de descongelarse y esté lista para servir.